Los fabricantes de alimentos y bebidas intentan constantemente aumentar la producción mediante lo siguiente: Reduciendo el tiempo de inactividad no planificado, eliminando desechos y mejorando el rendimiento laboral y operativo.
Cuando se enfrenta a una competencia cada vez mayor, que aumenta los costos y la presión de operaciones para optimizar el proceso de fabricación, encontrar formas nuevas y creativas de abordar estos problemas y mejorar la productividad puede ser un desafío. La buena noticia es que la conectividad puede ayudarlo a hacer precisamente eso.
Este informe explica cómo la conectividad puede ayudarlo a comenzar a optimizar sus operaciones al hacer más con menos.